"Illoooo..jajaja... oju que arte chikillo, oju que arte, jajajaja...no os lo vais a creer y el mister menos todavía....jajaja. Escucha, escucha que bueno ijo...jejeje. Para no fallarle al mister, fui bueno y me porté bien el Domingo en cierta medida . Es decir, que finalmente llevé a la carrera el Gps con buena carga , y no se me olvido la banda del pulsómetro, como ya os dije que a lo mejor se me podría olvidar. Hasta ahí todo bien. Inicio la carrera, y como es lógico con el transcurso de los kilómetros las pulsaciones van aumentando...140, 146, 151, 156, 163, 171, 174, 177, pero...jajajajaja, justo cuando iba a finalizar la ida de la 2º vuelta y justo cuando me estaba acercando a las "prohibitivas" 180 ppm ....jajaja...no os lo vais a creer...jajaja se me desajusta la banda del pulsómetro, se me resbala y se me pone en el ombligo...jajajaja, en serio, en serio de verdad...yo no tuve nada que ver en ello (bueno en to caso mi canijazo)...jajajaja..., así que tras intentar recolocármela una y otra vez, lo cual me fue del todo imposible corriendo, me dije pa mi mismo..."oleeeeeeee que "mala suerte" que he tenio...jajajaja...oooooo la banda del pulsometro me ha dejado de marcarme las pulsaciones...oooooooo jajajaja, jijijiji...po nada a seguir hasta que reviente, tota quien se va a dar cuenta ahora que voy pasao de vueltas...jajaja vamoooossssssssss".
Estas fueron las primeras impresiones de nuestro protagonista nada más cruzar el arco de meta de la "X Carrera Popular Playa de la Barrosa" (Nota Aclaratoria: "X", por su décima edición, no porque los atletas la corrieran en "pelota picá", tal como algunos nos han hecho ver en los comentarios de la anterior previa). Así que ya podréis intuir de las mismas, lo mucho que disfrutó y lo mucho que se desfogó nuestro Triatleta Caletero en la prueba dominguera chiclanera, sin nadie y sobre todo "sin nada" que así se lo impidiese, dando "rienda suelta" (nunca mejor dicho) y quitándose por tanto, de un "plumazo" toda la tensión y nerviosismo acumulado por sus tantas semanas de abstinencia competitiva obligada.
Pues bien, muy tempranito llegó nuestro pupilo, junto a su fiel escudera, la gran Sonita, a la zona deportiva del paseo marítimo de la Playa de la Barrosa, desde donde se daría la salida a la prueba a pie de playa. Allí recogió ese dorsal que tanto y tanto había echado de menos, y saludo a todos sus compañeros de club y amigos atletas de clubs vecinos, que iban llegando a la concurrida zona de recogida de dorsales. De igual manera, saludó a todo el personal de la Delegación Municipal de Deportes de Chiclana (Juan Carlos, Juan Jesús, Manolo, Parra, Pedro Luis, Rafael, José Luis, Quino, Diego, Remedios, etc...), responsables directos de la buena organización que tuvo la prueba.
Tras saludos y más saludos, el gaditano se dispuso a cambiarse de indumentaria y ponerse su ropa de "trabajo". Equipación oficial de atletismo del club, perneras 2XU, "voladoras" sauconys, su habitual gorra blanca triatlética, y como no su gps y su banda del pulsometro perpetrada en su pecho (algo floja diríamos, pero inicialmente perpetrada en su pecho). Un vez ataviado y vestido para la "ocasión", se dirigió sin más dilación a la orilla de la playa, para iniciar y realizar el prescriptivo calentamiento tan necesario para este tipo de pruebas tan explosivas, calentamiento que realizó junto a algunos de sus compañeros de club. Durante el mismo, nuestro TriCaletero pudo percatarse del "refrescante" viento de poniente que soplaba, que haría que los atletas corrieran a favor de viento en el camino de ida de la prueba, y como es lógico en contra del mismo a la vuelta, cosa la cual determinaría sin duda, la estrategia de carrera de nuestro pupilo en la prueba, como veréis más adelante. Sin más y tras la fotito de rigor, con todos los componentes del Club Deportivo Chiclanero que participaron en la prueba, directos al cajón de salida.
"Oleeeeeee que empiece esto ya, chikillo, que parece que se está levantado un poco de fresquito...jejeje". Nuestro TriCaletero emocionado y excitado por su reecuentro con la competición, no se podía estar quieto. Y no se quedó quieto y menos aún cuando escuchó en sus oídos esa deliciosa melodía de...¡¡ Plazzzz ¡¡...del pistoletazo de salida..."Vamooossssssss Vamooossssssssssss el último paga la conviá...jejeje". No cabía en su gozo.
Pistoleao, escopetao, como una bala salió nuestro TriCaletero, con la idea de safarse de los más de 750 atletas que finalmente participaron en la prueba, y evitar así las típicas masificaciones y tropiezos de inicio de carrera. Tanto fue así, que nuestro TriCaletero picó el primer kilómetro a unos rápidos 3:47 min. el km. A partir de ahí, siempre a rueda de sus compañeros de Club, Andy y Peque, levantó un poco el pie del acelerador, poniendo el piloto automático en torno a los 4:00 min. el km. (ritmo más que aceptable si tenemos en cuenta que la prueba se desarrollaba sobre la arena de la playa, donde la adherencia de la pisada es mucho menor). La estrategia de carrera de nuestro pupilo, fue muy clara: En el camino de ida a favor de viento, reservaría y dosificaría lo más que pudiera, para desgastar lo menos posible y poder así seguir corriendo a un buen ritmo en el camino de vuelta, en contra del viento. Pues dicho y hecho. Llegó a la pluma de giro de esta primera vuelta, picando el segundo kilómetro justo en 4:00 min. el km.
El camino de vuelta, nuestro TriCaletero lo hizo inmerso e inmiscuido en el seno del grupo que se acababa de formar tras girar la pluma, echándole el "aliento en el cogote" a sus compañeros de club Andy y Peque, para así combatir menos al viento e ir lo más cómodo posible (listo nuestro pupilo). Pese a ello, el viento hacía estragos en el grupo de nuestro pupilo, ya que el 3º kilómetro lo picó en 4:09 min. el km., mientras que el 4º, ya con cierta fatiga acumulada en sus piernas, lo picó en 4:07 min. el km.
De nuevo giro sobre el arco de meta, iniciando así la 2º y última vuelta. En su ida, nuestro TriCaletero siguió con la misma estrategia de la primera vuelta, y más aún teniendo en cuenta la fatiga que ya acumulaba en sus piernas (recuerden que en sus entrenos pretitaneros están predominando los rodajes semilargos a las series cortas). Pese a llevar el viento a favor, el 5º kilómetro lo picó ya en 4:06 min. el km..
En el transcurso del 6º Kilómetro se produjo la consabida incidencia de la banda del pulsometro que ya os contábamos. Justo cuando faltaban unos metros para girar de nuevo por la pluma y justo cuando le marcaba en su gps las casi prohibitivas 180 ppm., la "susodicha bandita" se le desajustó y se le aflojó a nuestro TriCaletero. Intentó una y otra vez recolocarsela, lo cual le fue totalmente imposible corriendo. Ello propició la desconcentración momentanea de nuestro TriCaletero en esta parte tan importante de la carrera, donde la fatiga y cansancio ya iba siendo más que patente en nuestro deportista. Como consecuencia de ello, nuestro pupilo fue poco a poco perdiendo la estela de su compañeros de Club, Andy y Peque, de los cuales se alejó unos metrillos. Menos mal, que por su lado y viniendo desde atrás le paso su amigo el gran "Lolo de Cai". El compañero gaditano de club de nuestro pupilo, al adelantarlo, arreó de sobremanera a su amigo el TriCaletero, al percatarse que este, iba perdiendo fuelle e iba perdiendo la rueda de sus otros dos compañeros de club..."TriCaletero vamos, que como te quedes solo vas a sufrir más todavía a la vuelta". Nuestro TriCaletero, se desentendió de la banda del pulsometro que dejó caer sobre su ombligo, y no dudó en coger la "buena rueda" del gran Lolo de Cai, metiéndose así de nuevo en carrera. Ello propició que nuestro pupilo volviera a contactar de nuevo con Andy y Peque, justo antes de girar por la pluma e iniciar los 2 últimos kilómetros de vuelta. Nuestro TriCaletero, como consecuencia de la incidencia de la banda del pulsometro y a su cansancio ya acumulado, picó el sexto kilómetro en 4:09 min. el km.
Ya muy desgastado, se colocó de nuevo en el seno y/o a la cola del grupo (conformado ahora por Andy, Peque, Lolo, y 4 corredores más), para combatir de nuevo el viento lo menos posible, ya que las piernas de nuestro pupilo ya os decimos que no estaban para muchas exigencias que digamos. De igual modo, la fatiga de los atletas que conformaban el pequeño grupo de nuestro deportista, era más que latente, siendo este kilómetro, el 7º, el kilómetro más lento de todos. Lo marcó a 4:15 min. el km. Nuestro TriCaletero, al percatarse de la considerable ralentarización del ritmo al paso por dicho kilómetro, apretó un poco en este ultimo kilómetro en unos de sus habituales arranques de orgullo y pundonor, eso sí siempre fenomenalmente llevado por la rueda del gran "Lolo de Cai".
Tras este arreón, nuestro pupilo se desquitó de casi todos los atletas que conformaban el grupo, solo pudiéndole seguir la rueda de todos ellos, su compañero de club "Peque". No obstante, a unos 400 m. de meta, tanto "Peque" como nuestro pupilo no le quedaron otra de dejar de ir al "Gran Lolo de Cai" (fuerte como el solo), propiciado por un último y espectacular arreón que pegó éste, que no fueron capaz de seguir (que krak)..."Al carajo Lolo, te va seguir un guardia, que este que está aquí ya le está rebosando el ácido láctico por las orejas". Nuestro TriCaletero picó este casi último kilómetro a 4:04 min. el km., cruzando el arco de meta, en un fabuloso tiempo final de 32 min. 20 seg. corriendo por tanto los 7 km. con 920 m. que finalmente tuvo la prueba a una excelente media de 4:03 min. el km.
Nuestro Triatleta Caletero se clasificó el 83º de la general de un total de 748 participantes, y el 32º de su categoría de un total de 199. Por tanto, fenomenal clasificación la conseguida por nuestro pupilo en la prueba playera chiclanera, en la que no sabemos si alcanzó o no las prohibitivas 180 ppm (que creemos que si las sobrepasó y con creces), pero de lo que si estamos seguro es que si sobrepasó fue su umbral máximo de goze y disfrute, que seguro seguro llegó al 100%, en esta su vuelta a las competiciones después de más de 40 días sin colgarse un dorsal.
Tras la carrera, recogida de la fabulosa camiseta técnica conmemorativa de la prueba, rehidratación, estiramientos, comentarios varios de la "jugada" con los compis, visualización de la clasificación y entrega de trofeos, tras la cual nuestro pupilo puso punto final a su participación en esta "X Carrera Popular Playa de la Barrosa".
Pd.1: Nuestro TriCaletero esta muy contento. ¿Qué porqúé?. Échenle una visual al calendario competitivo de nuestro TriCaletero en la columna de la derecha de este vuestro blog. Si señores si. Competis, competis y más competis. El exigente mister del TriCaletero, ante la ansiedad y nerviosismo que sabe que le crea a su pupilo el no competir o más aún, el no saber si va a competir o hasta cuando no lo va hacer, le ha adelantado en días pasados algunas de las competiciones y pruebas en las que participará en los meses venideros hasta el 1 Octubre. No son muchas, si lo comparamos y tenemos en cuenta que el año pasado por estas fechas el gaditano engarzaba fines de semanas bicompetitivos unos tras otro sin descanso, pero...algo es algo. Así el mister de nuestro pupilo, intentará mitigar la ansiedad y reducir el nerviosismo de nuestro deportista, en pro y en beneficio de su bienestar físico, pero sobre mental.
Pd.2: Nuestro carismático deportista sigue con sus sacrificados entrenos pretitaneros. Sigue sin saltarse y sin perdonar ni uno. 73 sesiones planificadas hasta la fecha, y 73 sesiones completadas. Ya lo conocéis. Os podemos asegurar, que no se ha saltado ni un metro, ni un kilómetro, ni una serie, ni un intervalo, ni un minuto, ni un segundo. Que krak. Actualmente, en esta semana esta finalizando su 9º semana de entrenos pretitaneros, entrenos de los que os seguiremos informando en próximas entradas a la espera de la próxima para competitiva de nuestro TriCaletero, que ya será el próximo 31 de Julio en el "I Triatlón Olímpico Pirata "Los Merones" 2011". Hasta entonces, reciban saludos cordiales.
Que grande eres "quillo".
ResponderEliminarPutada lo de la banda en el pecho. Tu que estabas pendiente de ella todo el rato, que no se te olvidase y de que no se moviese, y vaya, justo en el "peor" momento se cae.
Joer, esas cosas suelen pasar. La Ley de Murphy
Un saludo.
Que guapa esa carrera!!!! lastima que por mi tierra no tengamos playa....cachis!!
ResponderEliminarEnhorabuena por tu gran carrera y genial cronica.
Un saludo
Quique